Querida amiga, a mi también me rompieron el corazón, pero igual sigo. Con mis días buenos y malos, pero sigo. Con sonrisas y alguna que otra lagrima, pero sigo. A palos, si, pero sigo. Porque ser valiente no es luchar y aferrarte a alguien con todas tus fuerzas o pasar las noches en vela llorando esperando a que regrese.. Las verdaderas valientes son las que saben decir "Hasta acá" y ponen un fin a las mentiras, a la angustia, al sufrimiento.. A ese cumulo de cosas que llegan cuando el amor se va y hacen tan mal porque tarde o temprano se irán, y es algo que hay que saber aceptar. Las fuertes no son las que perdonan una y mil veces, las que hacen mil cosas por recuperar e intentan por todos los medios hacerle el boca boca a sentimientos que hace tiempo están muertos, las fuertes de verdad son las que deciden marcharse. Las que aprenden a superar, aun sabiendo lo que eso cuesta. Las que se levantan de la cama sin el y afrontan el nuevo día con la mejor sonrisa. Las que saben que si realmente quiere volver; volverá. Y que si no vuelve, jamas habrá merecido la pena. Porque sentir dolor es inevitable pero sufrir es opcional. Y somos de las que decidimos no sufrir. De las que sabemos que merecemos ser felices cueste lo que cueste. Y eso no significa que queramos menos que las demás, simplemente tenemos un secreto que aprendimos con el tiempo y las decepciones; querernos a nosotras mismas por encima de cualquier cosa. Porque si no lo haces, estas perdida. Y ya vendrá otro que te haga vibrar de nuevo.. Tenemos toda la vida para encontrarlos. Así que no desesperes. Que a tu lado tendrás siempre lo que te mereces, que no es poco. Y el ha demostrado ser bastante menos que eso. Y es que, querida amiga, como podría yo explicar que la pena dura tanto como quieras tu seguir llorando..
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